yo los hice con hojaldre congelado pero si se hace en casa saben mucho mejor. Para el hojaldre 250 gramos de mantequilla; 250 de harina, 1/2 vaso de agua y un poco de sal.
Para el relleno, 200 gramos de almendra molida tostada; 200 gramas de azúcar, dos huevos, media tacita de vino Málaga Virgen; la ralladura de medio limón.
Los moldes se untan con mantequilla, se estira un poco el hojaldre y se forran con el, se pincha con el tenedor para que no se hinchen al cocer.
Se mezcla la almendra con el azúcar, el vino dulce, la ralladura del limón y los dos huevos. Las claras se baten un poco antes de agregarlas y las dos yemas. Se revuelve bien todo hasta que queda una masa bien integrada, se van rellenando los moldes, y se hornean a horno medio hasta que el hojaldre se vea hecho, yo los tuve 20 minutos pero depende del horno.
Una vez cocidos se sacan y se dejan enfriar.
Se hace el baño de yema poniendo a cocer 100 gramos de azúcar con cuatro cucharadas de agua hasta que se haga almíbar, unos 10 minutos, se añaden cuatro yemas y se bate bien con un tenedor hasta que espese. Se bañan los carbayones por encima y se dejan enfriar.
Entonces hacemos el baño blanco, tres tazas de agua, cuatro de azúcar, se pone a hervir otros 10 minutos hasta que se haga almíbar fuerte, entonces se añade fuera de la lumbre el zumo del limón y se bate sin parar hasta que se haga blanco. Se bañan los carbayones y se dejan enfriar media hora. Se desmoldan y se pasan a los moldes de pale rizado y listos para comer.
El baño blanco se cuaja enseguida, hay que echarlo pronto sino se hace un bloque. Hice doce pasteles y me sobró de todo para hacer la tarta carbayón que os pondré aparte.
